domingo, 21 de octubre de 2012

Silencio


El silencio está tremendamente infravalorado. La gente cree que para estar con otras personas de forma confortable se tiene que estar hablando el mayor tiempo posible. En un grupo de más de diez personas el resultado es una horrenda cacofonía que impide que uno escuche incluso sus propios pensamientos.

Para aquellos pocos que saben cómo disfrutar de un ambiente tranquilo y silencioso estar en, por ejemplo, una clase en la que todos los alumnos están hablando al mismo tiempo resulta muy desagradable, llegando incluso a causar reacciones físicas como un dolor de cabeza.

El efecto adverso de estas situaciones se acentúa más por la costumbre humana de gritar más que el de al lado. De este modo la cacofonía va subiendo el volumen hasta convertirla en lo que parece una asamblea de gallos al amanecer. Solo que este amanecer puede durar horas.

miércoles, 17 de octubre de 2012

Cerdos



La ventaja de ser una marginada es que la gente se olvida de tu presencia con asombrosa facilidad. Es increíble lo que se puede llegar a escuchar cuando a la gente a tu alrededor no le importa lo que puedas opinar, pensó ella tratando de ignorar a los dos chicos y centrarse en la pantalla de su portátil. No le interesaba escuchar aquello, no quería escucharlo.

A cada palabra, su fe en la raza humana y, sobretodo, en el género masculino, se iba hundiendo más y más.

¿Qué le importaba a ella que uno de esos chicos, que aparentemente llevaba dos años con la novia, aprovechase cada oportunidad que tenía con su trabajo de DJ para acostarse con otras mujeres de las que hablaba como si fuesen zorras en celo que prácticamente se le abrían de piernas al estar con él tres minutos? ¿O qué el otro chico llamase a las becas Erasmus “Orgasmus”, como al parecer hacían otros tantos, por lo fácil que le había resultado acostarse con mujeres en el extranjero? Por supuesto, el segundo también tenía una novia de varios años-

Mientras los escuchaba, la chica no pudo evitar pensar que lo iba a tener difícil para encontrar novio y, sobretodo, para mantenerlo. Ella no podía ni imaginarse manteniendo una relación cordial con esa clase de hombre, mucho menos una relación romántica. Al pensar en eso no pudo evitar sentir lástima por las pobres chicas que salían con los tipos sentados frente a ella, y se preguntó qué clase de personas serían: ¿no sabrían lo que sucedía? ¿Tenían una opinión tan baja de sí mismas que aceptaban aquello como lo mejor que podían conseguir? ¿O acaso estaban bajo la impresión de que conseguirían cambiarlos con el tiempo?

Mientras apagaba el ordenador, pensó que si un hombre le hacía algo así a ella lo mataría. Y no encontrarían el cadáver.

martes, 16 de octubre de 2012

Visión


Me dolía la cabeza. Me dolía tanto que apenas era consciente del frío a mi alrededor, y no me di cuenta de que me había caído hasta que mi cuerpo impactó contra el asfalto, y ni siquiera entonces me importó. Todo me daba vueltas, era incapaz de centrar mi atención en un objeto porque estos bailaban ante mí, divididos en tres formas iguales que iban de la mano.

Por no notar, apenas era consciente de la sustancia caliente que cubría buena parte de mi hombro derecho, brazo y costado.

El sonido de tambores que parecía haberse instalado en mi cabeza se intensificó, y los objetos a mi alrededor comenzaron a difuminarse.

Lo último que vi, antes de perder el conocimiento tirada en una vía de servicio de la autopista, fue un arcoíris de luces brillantes acercándose lentamente.